jueves, 25 de junio de 2009

Cobertura Periodística sobre el Patrimonio Cultural


Conclusiones del Seminario-Taller de Validación organizado por Oficina Regional de Ciencia para América Latina y el Caribe Representación de la UNESCO ante el MERCOSUR

Representación de la UNESCO en Argentina, Paraguay y Uruguay.

Villa Ocampo, San Isidro, 9, 10 y 11 de junio de 2009

Comunicadores y expertos en patrimonio cultural del Mercosur, Cuba, Haití, Dominicana, Francia y Alemania reflexionaron sobre la cobertura periodística que recibe un tema cada vez más estratégico para las sociedades modernas.

Documento Final
La UNESCO nos ha convocado a este Taller impulsado y auspiciado por las oficinas en Montevideo para el MERCOSUR y La Habana para el Caribe Latino, que culmina en esta primera etapa del seminario-taller realizado en Villa Ocampo.
Durante dos días hemos realizado una aproximación a las convenciones, recomendaciones y posturas de la UNESCO sobre el patrimonio en su amplia diversidad, mediante la contribución de expertos de la organización, de autoridades y especialistas del patrimonio y de periodistas.
Nos acercamos también, a la situación de la cobertura periodística de la cultura, especialmente la relacionada con el patrimonio en todas sus facetas y en la región.
Con ese fin, los periodistas de Argentina, Brasil, Cuba, Haití, Paraguay, República Dominicana y Uruguay, ofrecieron una panorámica de la situación de la cobertura periodística en sus países y aportaron definiciones y una amplia visión sobre la práctica del periodismo en su relación con el patrimonio. Además, participaron en un ejercicio práctico de aproximación a ejemplos concretos de cobertura en diversos soportes y medios.
Por su parte, los expertos en el patrimonio aportaron su visión desde la perspectiva de las fuentes autorizadas para la consulta periodística y ofrecieron una panorámica de las acciones realizadas desde sus instituciones y organizaciones a favor de la comunicación efectiva del patrimonio.
Expertos y periodistas analizaron los obstáculos que enfrentan a la hora de posicionar un tema que debía ser de interés común, en los medios de comunicación y se aproximaron desde sus perspectivas en un ejercicio de conciliación de visiones que podría apuntar las posibilidades aun inexploradas en el camino de comunicar el patrimonio.

En general se abordaron los siguientes temas:
• Las fuentes seguras: las formas de consulta de las fuentes autorizadas y la valía de cualquier fuente a consultar siempre y cuando se contrasten y contrapongan en función de aportar una visión lo más acertada posible del tema patrimonial.
• Los expertos como comunicadores de los contenidos patrimoniales y como generadores de información, más allá del sistema de eventos y conmemoraciones.
• Las competencias periodísticas: cómo el periodista debe prepararse lo suficientemente para enfrentar un tema tan especializado como el patrimonio; el debate entre la realización de un periodismo que tienda a lo educativo o únicamente a lo informativo en el terreno de lo patrimonial.
• Alternativas para comunicar el patrimonio: el empleo de todos los soportes, medios y sistemas de comunicación teniendo en cuenta que la región ofrece un panorama de disparidad tecnológica y social, que se evidencia en el ejercicio del periodismo; ¿cómo alcanzar a muy distintos públicos con un tema que les pertenece y del cual muchas veces no son conscientes?
• Tecnologías: Las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías, especialmente las relacionadas con el acceso a Internet, para emplear otro tipo de herramientas en el camino de comunicar el patrimonio; la certeza de que existen públicos nada despreciables que no pueden acceder a ellas, a los cuales se debe abordar empleando otros medios tradicionales y una buena dosis de creatividad.
• Formación profesional: las escasas oportunidades de superación y formación profesional que se ofrecen a los periodistas, editores y decisores en el escenario mediático, para contar con un verdadero conocimiento del universo cultural y patrimonial y de las buenas prácticas de cobertura periodística del patrimonio. 

Recomendaciones:
• La UNESCO podría sistematizar este esfuerzo iniciado en función de aportar herramientas e información especializada a los periodistas para la cobertura del patrimonio, desarrollando talleres y herramientas para la acción en muy diversos soportes.
• Las autoridades del patrimonio, deberían incursionar en asociaciones con los medios de comunicación y las instituciones educacionales, en función de auspiciar la formación y elevar la sensibilidad de aquellas personas que administran las empresas y consorcios de la comunicación, de cuyas decisiones depende en muchos casos la importancia o no que se le conceda al tema en sus publicaciones.
• Desarrollar una red de comunicadores culturales y del patrimonio como base de trabajo y relacionamiento de los periodistas que se interesen o se consagren al tema que cuente con el aporte permanente de distintas instituciones y expertos en la materia. A esta red la UNESCO y las instituciones del patrimonio, podrían proveerla de información veraz y oportuna, poniendo mayor interés en aquellos medios comunitarios y de menor alcance que alcanzan a públicos de interés y nada despreciables.
• Estudiar las potencialidades de la gestión turística, en lo concerniente a los medios de comunicación, para proponer un abordaje más atractivo y oportuno de los tesoros patrimoniales de la región.
• Fomentar la realización de eventos de capacitación periodística por país y regionales, con el propósito de integrar las políticas y las prácticas del periodismo cultural y especialmente del consagrado a la defensa del patrimonio.
• Las instituciones públicas podrían apoyar el desarrollo de programas de becas, ciclos de investigación y premios que fomenten las buenas prácticas del periodismo dedicado al patrimonio.

Este es un inventario breve de los presupuestos, definiciones y elementos aportados por los participantes en el seminario-taller. El paso próximo será mantener la comunicación entre esta red de periodistas y expertos que se inicia e insertar en el cuerpo final de la Guía para la cobertura periodística del patrimonio, tras un detallado análisis y decantación, aquellos elementos imprescindibles y aun no incorporados a ese instrumento de educación periodística.

martes, 2 de junio de 2009

Centro de Fotografía de Montevideo

Veo, veo
Una imagen emblemática del CDF:
boxeo entre un hombre y un canguro
en espectáculo de circo en el
field de Pocitos, c. 1910.
Fue creado en 2002 para investigar, preservar, promover, el patrimonio fotográfico de la ciudad y el país. Como custodia de bienes históricos realiza la conservación preventiva de originales, su digitalización y descripción documental. Como difusor de la fotografía entre públicos diversos, organiza visitas didácticas, tertulias, charlas, talleres y seminarios, que abren espacios para el debate y el libre intercambio de ideas. Su Sala de Exposiciones, emblema de la divulgación del trabajo fotográfico contemporáneo, fue inaugurada en marzo de 2005.

Sobre la base del  del libro Montevideo. Manual del Visitante (2011-2012-2013), y del fascículo Centro de Fotografía de Montevideo, de la serie Paseos que Enseñan, realizada por Trocadero Gabinete DDiseño para el diario El País (N° 19, octubre de 2008).

Es una institución dedicada a la investigación, preservación y divulgación de imágenes antiguas y contemporáneas del país, con cinco líneas de trabajo: acervo histórico, foto contemporánea, sala de exposiciones, difusión educativa, Ediciones CDF. Custodia la producción fotográfica de la Intendencia de Montevideo, y reúne archivos incorporados a través de acuerdos con instituciones públicas y privadas, y por donaciones familiares e individuales. 
El Fotoviaje del CDF cumplió mil visitas.
Para la difusión de la fotografía entre públicos con intereses diversos, desarrolla múltiples actividades formativas y de intercambio: tertulias, charlas, talleres, seminarios, jornadas anuales. Sus paseos educativos están concebidos para escolares del tercer año, que en sus planes de estudios aprenden sobre la identidad cultural de los barrios y su papel en la sociedad. Su sala de exposición permanente, la primera destinada exclusivamente a la fotografía, difunde el acervo propio y la obra de autores contemporáneos, uruguayos y extranjeros, seleccionada en convocatorias libres y abiertas.

Centro de Fotografía de Montevideo

Barrio: Centro 
Sedes: 18 de Julio 885 (ex Bazar Mitre),
San José 1360 y Ejido (Túnel de la IM).

Teléfono: 1950 1219
Página Web: www.montevideo.gub.uy/fotografia E-mail:
cdf@fotografia.imm.gub.uy Las visitas guiadas deben ser coordinadas previamente por el teléfono.
El CDF está abierto de lunes a viernes, de 10.30 a 19 horas, y los sábados de 9.30 a 14.30. Fotoviaje es un visita didáctica, que se realiza en dos turnos, los martes (14 y 15 horas) y lo viernes ( 9.30 y 10.30 horas). Tiene una duración de 50 minutos y debe ser agendada con anticipación.

PREGUNTAS QUE GUÍAN: ¿Cómo se saca una fotografía? ¿Cuándo una foto es un patrimonio histórico? ¿Cómo es el trabajo de un fotógrafo? ¿Por qué es necesario preservar un archivo de imágenes? ¿Cómo evolucionó la máquina fotográfica? ¿Cuáles son las ventajas y las desventajas de la fotografía digital? ¿Qué es un archivo fotográfico?

Sala de Exposiciones
Es un sitio para mirar, aprender y jugar, que se disfruta a todas las edades. La Sala de Exposiciones del Centro Municipal de Fotografía es la primera de su tipo en el país, creada en 2002, desde entonces dedicada a la difusión permanente de un patrimonio encantador de Montevideo, de Uruguay y de su gente. Recoge imágenes históricas que evocan los primeros tiempos del país que comparten un espacio común con obras de modernos autores de la vanguardia fotográfica . “Los visitantes que vienen en busca de retratos o paisajes de nuestro archivo histórico, toman contacto con autores contemporáneos que aportan otras formas, otros colores, otras sensibilidades”, asegura Daniel Sosa, coordinador del CDF.


Ex Bazar Mitre
Es la nueva sede del Centro de Fotografía de Montevideo, donde funciona un Laboratorio Integral de Conservación de Imágenes Fotográficas. En el histórico edificio de 18 de Julio 885, Río Branco y Convención, se proyecta la creación de un centro de formación regional del trabajo con y a partir de las fotografías.
Por estar dotado de mayor superficie y mejor infraestructura, potenciará las posibilidades de acceso a los distintos fondos fotográficos y permitirá habilitar la mediateca al público, que cuenta con una vasta colección bibliográfica sobre técnica, autores, conservación e historia, y todas las producciones audiovisuales del CDF. La nueva sala de exposición estará acondicionada de acuerdo a parámetros internacionales, lo cual también permitirá organizar con frecuencia exposiciones de autores y colecciones de todo el mundo.

Fotografía
Es el proceso de capturar imágenes y almacenarlas en un material sensible a la luz. Se basa en el principio de la cámara oscura que consigue proyectar una imagen captada por un pequeño agujero. Las cámaras fotográficas utilizaban hasta hace algunos años exclusivamente la película sensible, mientras que en la actualidad se emplean, casi siempre, sensores y memorias: es la nueva era digital.

El término procede del griego phos (luz), y grafis (escribir), que en su conjunto significa "escribir con la luz".

Tribus
Desde su creación, el CDF promueve y difunde la Fotografía con exposiciones y actividades audiovisuales y con la publicación de trabajos. Ediciones CDF publicó en 2008 el libro Tribus, sobre un reportaje gráfico de Iván Franco, que describe la vida de dos comunidades guaraníes, los Narandy y Cabayu Paso, nativos de la selva paraguaya cerca de la frontera con Brasil. “Fue una de experiencia conmovedora; sentí a mi regreso que era otro, que mi visión del mundo había cambiado, que había crecido y que en algunos aspectos, la calidad de vida de este pueblo es superior a la nuestra”, afirma Franco. “Gente pura”, tituló la fotógrafa y docente Diana Mines, su artículo publicado en el semanario Brecha.

Carlos Vaz Ferreira
Familiares del gran filósofo uruguayo donaron negativos de gelatina y plata -656 en soporte plástico y 295 en vidrio- que describen momentos desconocidos de su vida. Las fotografás, debidamente acondicionadas, documentadas y catalogadas fueron expuestas en el reciente Día del Patrimonio y ahora forman parte del acervo del CDF.

Libreta de apuntes
Creado en 2002, el Centro de Fotografía (CDF) de la Intendencia de Montevideo custodia un acervo patrimonial de 100.000 fotografías históricas del período 1865-1990 y más de 10.000 imágenes contemporáneas hasta la actualidad. Se trata de fotografías producidas por la IM, desde el año 1916, y otras incorporadas por donaciones y convenios con instituciones y particulares. La institución cumple una tarea patrimonial de acuerdo a normas internacionales de calidad para la conservación preventiva de los originales, en una cámara especial con temperatura y humedad controlada, así como su digitalización, descripción documental mediante técnicas de investigación histórica y archivística. La catalogación de las fotografías se lleva a cabo a partir de un vocabulario controlado, creado especialmente para este acervo. El Centro también promueve y difunde la revalorización y el acceso a los archivos fotográficos de todo el país. Sus equipos multidisciplinarios visitan instituciones para brindar orientación sobre conservación, digitalización, documentación, y trabajan en la creación de una red nacional de intercambio de información y conocimientos.

El CDF produce "f/22. Fotografía en profundidad" y "Fotograma Tevé", programas televisivos en los que se entrevista a personas vinculadas a la fotografía desde diferentes campos, se divulgan nociones de técnica y se difunde el trabajo de autores de todo el mundo. Se emiten semanalmente por Televisión Nacional y TV Ciudad.

También ha participado y producido audiovisuales, como el documental "Al pie del árbol blanco", que cuenta el hallazgo de un gran archivo de negativos de prensa, extraviado por más de treinta años.

Feria de Fotógrafos es una actividad de participación libre en la que se exhiben y venden obras en la vía pública. Jornadas de Fotografía es una actividad que reúne la anual organizada en temas.

Fotograma es un encuentro internacional que cada dos años presenta trabajos representativos de la producción fotográfica nacional e internacional en diferentes puntos del país, a través de muestras, charlas y conferencias de autores.

Los fotógrafos del CDF realizan un registro permanente del acontecer de la ciudad, a partir de los proyectos Nosotros, Transporte, Transformación Urbana.

Entre sus incorporaciones se destaca la colección del diario El Popular: un patrimonio documental del pasado reciente uruguayo, preservado por más de 33 años, por el fotógrafo Aurelio González.

A Cielo Abierto se denominan los espacios libres de exposición del CDF, en el Parque Rodó, el Prado, el Teatro Solís y la Ciudad Vieja, con capacidad para más de cien fotografías de gran formato. Consiste en paneles diseñados que tienen por objetivo ampliar el ambiente de encuentro e intercambio entre los realizadores y el público.

7.000
Es la cantidad de fotografías que están a disposición del público en un catálogo de rápida y fácil consulta. Son impresiones de archivos digitales sometidos a investigaciones históricas y patrimoniales e interpretados, a partir de negativos originales, por los fotógrafos del CDF.

MINIBIO
CARLOS ÁNGEL CARMONA (1865-1932)
Nacido en Montevideo, fue el primer fotógrafo municipal, contratado en 1916 para retratar actividades festivas, inauguraciones de obra, edificios y monumentos de la Ciudad Vieja, Centro, Prado, La Comercial, la rambla de Pocitos, Malvín, Carrasco. Durante más de tres décadas registró el crecimiento de una ciudad en expansión, en tiempos que era la capital de una “Suiza de América” que recibía inmigrantes de todo el mundo. “Era un hombre muy prolijo, muy detallista y tenía un gran amor por su trabajo; lo demuestra como dejó fijado cada fotograma y como organizó su archivo”, asegura Daniel Sosa, coordinador del Centro de Fotografía. Con su colega y compañero de tareas, Isidoro Damonte, realizó una minuciosa recolección y duplicación de fotos antiguas sacadas desde 1865. “Sin ese trabajo no tendríamos nuestro actual acervo histórico; que juntos identificaron y clasificaron a mano”, asegura.
Muchas de las fotografías históricas custodiadas por el CDF formaron parte del archivo profesional de Carmona, donado por su familia como una contribución a la cultura y la memoria montevideana. “Tenía un talento y una visión increíble, fuera de lo común, con una visión moderna de la fotografía y de su preservación patrimonial”, concluye Sosa.

Isidoro Damonte fue compañero de Carlos Ángel Carmona en la Comisión de Fiestas de la Intendencia de Montevideo, desde 1916, y lo acompañó en la fundación del Archivo Fotográfico.

El CDF tiene un sitio web (www.montevideo.gub.uy/fotografia) con información sobre su actividad, acervo y proyectos fotográficos.

Fotoviaje: una visita al Centro de Fotografía de Montevideo
¡Increíble, pero cierto!
Calos Ángel es interpretado
por el actor Pablo Tate.
Cuando Carlos Ángel aparece en escena, luego de un extenso viaje de casi un siglo, desde la cercana Playa Ramírez, suele haber un profundo silencio entre los invitados, casi siempre escolares de tercer año. Les da la bienvenida, aunque siempre llega tarde, mientras se arregla el gacho tanguero y se saca de los zapatos un montón de arena. Es un personaje de otro tiempo, que todavía disfruta contando las historias de dice haber fotografiado: la memorable inauguración del Palacio Legislativo en 1925, la asombrosa construcción del Palacio Salvo en 1928, o la gloriosa final de 1930, que habría presenciado en un repleto estadio Centenario, en una tribuna América todavía fresca y con los andamios aún sin desarmar.
Carlos Ángel es el guía de las visitadas didácticas del Centro de Fotografía. Un personaje de ficción, pero que también es muy real, porque así se llamó el primer fotógrafo municipal y creador del Archivo Fotográfico de Montevideo.
¡Mentiroso, no se puede viajar desde el pasado! –la mayoría de los visitantes, casi todos de ocho años, suelen creer su historia, aunque siempre hay alguno que la pone en duda.
Jovencito soy un hombre de honor, y no miento. ¡Increíble, pero cierto! –responde Carlos Ángel, con profunda sinceridad. Tanta, que convence a los incrédulos.

Carlos Ángel es un divertido fotógrafo de todos los tiempos, que propone una aventura didáctica, repleta de imágenes, para que los alumnos de tercero de escuela vean cambios y permanencias de una ciudad y de un país.

El Cabildo y la Iglesia Matriz, la Puerta de la Ciudadela y las plazas Independencia y Cagancha, la avenida 18 de Julio, sus edificios y su transporte, el Palacio Legislativo, el Estadio Centenario, el Parque Rodó, la rambla, la playa Pocitos. Son algunas de las fotografías que recorren un siglo y medio de historia, explicadas por un extraño guía que dice haberlas sacado todas: Carlos Ángel.
Disculpen la demora, pero vine en cachila, desde 1920, y el tráfico de la ciudad está cada vez peor –se excusa, mientras saca arena de la cercana playa Ramírez de sus zapatos.
¿Dé dónde venís? –le preguntan, con cara de duda.
¡De 1920! ¿No se nota en la ropa? –responde con seguridad, al tiempo que se arregla el gacho, típico sombrero de su tiempo.
¡Pá, pero estás espectacular! No parecés tan viejo –elogia un curioso de unos ocho años, vestido de túnica, que no duda de su palabra.
Así transcurren los 50 minutos de visita al CDF, entre historias montevideanas, reales, repletas de humanidad, nacidas de fotos que cuentan sobre cambios y permanencias; que se mezclan con anécdotas inverosímiles que cuestionan las verdades más absolutas.
A ver quién sabe, ¿para qué sirve una foto? –interroga Carlos Ángel, casi al final de la visita, con tono tierno y desafiante. Así surgen decenas de buenas utilidades: para mirar, para compartir, para informar, para guardar, para disfrutar.
Para recordar –contesta alguien desde el fondo, que casi no se ve, de tan tímida y menudita.
Por un instante, el ocurrente guía queda en silencio, se pone serio, se saca el sombrero.
¡Tenés razón! –asiente con una reverencia. –Una foto es para recordar, porque recordar viene de “recordis”, que significa volver al corazón. Y una foto es eso: regalarle imágenes a nuestro corazón.
Antes de la despedida, hay que retratarse con Carlos Ángel, una oportunidad única para salir con un personaje único, insólito, irrepetible.
Pero vamos a cambiar la palabrita, porque eso de whisky no es de mi tiempo. ¡Se oyen ofertas! –propone el anfitrión, apurado porque había dejado mal estacionada la cachila que debía a devolverlo a 1920.
Los alumnos de la escuela 85, República de la India, salieron en la foto que recuerda su visita al CDF, diciendo: “chinchulín”.

¿Para qué?
-Para ver imágenes del pasado de Montevideo.
-Para trabajar sobre la Fotografía como documento y cuestionar su carácter de verdad absoluta.
-Para conocer nociones básicas de Fotografía.
-Para saber los principales hitos de la historia fotográfica.
-Para tener una noción de cambio histórico a través de la imagen.
-Para compartir una idea de Fotografía como fuente de la Historia.

Objetivos
-Difundir el acervo del CDF procurando que los niños se familiaricen con imágenes del pasado de Montevideo.
-Trabajar sobre la fotografía como documento y cuestionar su carácter de verdad absoluta.
-Brindar nociones básicas de Fotografía.
-Informar los principales hitos de la historia fotográfica.
-Introducir la noción de cambio histórico a través de la imagen fotográfica.
-Trasmitir la idea de Fotografía como fuente de la Historia.

A imagen y semejanza de la Iglesia Matriz
Louis Compte, el abate fotógrafo
La iglesia Matriz por Louis Compte.
A fines de febrero de 1840 arribaba a puerto la nave escuela L’Orientale, con una tripulación experta y jóvenes pasajeros, estudiantes franceses y belgas que daban la vuelta al mundo. Por lo menos dos pasajeros poseían daguerrotipos para registrar las ciudades que iban conociendo en su aventura: el profesor belga Luís Antonio Vendel y el abate Louis Compte, que había conocido a Louis Daguerre en París.
En diciembre del año anterior, la corbeta había recalado en Bahía y en enero pasaba por Río de Janeiro. Por entonces el abate Compte ya era célebre, luego de haber sacado varias tomas del Palacio Imperial y del puerto carioca. Tan famoso, que la prensa montevideana lo aguardaba con ansiedad, para conocer de qué se trataba aquella máquina increíble.
El 29 de febrero, luego de algunas exhibiciones en casas particulares, hubo una sesión pública en la Casa de Representantes del Cabildo; desde allí fue captado el frente de la Iglesia Matriz. Una imagen histórica, irrepetible, que obsequió al eminente médico Teodoro Vilardebó, y que forma parte de la memoria de Montevideo y de los montevideanos. Es el más antiguo daguerrotipo documentado del Río de la Plata, reproducido el 4 de marzo de 1840 en el periódico El Talismán. Esa misma tarde se realizaron nuevas sesiones fotográficas en la casa de una personalidad de la época, Santiago Vázquez, el ministro de Relaciones Exteriores Santiago Vázquez que vivía en la calle Sarandí, donde actualmente está el Club Uruguay. Desde allí el abate Compte sacó la fachada del Cabildo.
La corbeta L’Orientale siguió viaje, sin recalar en el puerto de Buenos Aires, bloqueado por la flota francesa: eran tiempos difíciles de la Guerra Grande rioplatense. En mayo arribó a la bahía chilena de Valparaíso, desde donde salió un mes después rumbo a Lima. Un destino que jamás alcanzó, porque quedó encallado en un sitio peligroso del Océano Pacífico, conocido como la Roca del Buey. Los 60 pasajeros resultaron ilesos y pudieron rescatar el valioso daguerrotipo del profesor Vendel.
El abate Compte no estuvo entre los accidentados. En la travesía atlántica había empeorado una enfermedad que le perseguía desde París: se quedó en Montevideo un tiempo, alojado en la calle 25 de Mayo. En octubre de 1840 anunció a través de la prensa que había recibido un nuevo daguerrotipo más simplificado y ofreció enseñar a los interesados sobre su manejo. El primer fotógrafo que trabajó en el país, regresó a París en 1847.


La foto más antigua del archivo del CDF, de 1865, fue reconocida por su tema (los ataques a la iglesia de Paysandú en el sitio de ese año), y porque fue sacada en placas de gelatina que se usaban por entonces.

Isabel Wschebor, historiadora, investigadora del patriomonio fotográfico de la ciudad
“La imagen debe responder nuestras preguntas”
Con su colega y compañera Magdalena Broquetas tiene la responsabilidad de documentar las imágenes del Centro de Fotografía de Montevideo: darles carácter patrimonial e integrarlas en el archivo.

-¿Qué hace un historiador en un archivo fotográfico?
-Nuestro trabajo es buscar la información de una foto, a veces visible, a veces invisible; para identificarla, preservarla y organizarla dentro del archivo. Utilizamos distintas técnicas de investigación, pero también necesitamos de mucha intuición y sentido común. Hace un tiempo nos pasó algo muy interesante y divertido con una imagen antigua del Mercado del Puerto, que presentaba muchas dificultades para saber su año. Buscábamos ese dato mirando la vestimenta, poniendo atención en la construcción del edificio, en el transporte o en el tendido eléctrico, pero no había caso, no conseguíamos la información. Cuando hicimos una ampliación, acercándonos a los detalles, vimos un grafitti que nos aportó una pista: en una pared decía “Viva Viera”. Así nos dimos cuenta que era de poco antes de 1915, porque ese año Viera asumió la presidencia de la República; y esa inscripción era de la campaña electoral. Ese fue el primer dato, luego fuimos sumando otros, y así supimos el año de la foto. También nos ayudan mucho los fotógrafos, porque conocen el estilo de sus colegas; ellos pueden saber cuando es una foto de mediados o fines del siglo XIX, o de principios del siglo XX. Es un trabajo de equipo, y es imprescindible que nos comuniquemos mucho entre todos.

-¿Cuando una foto es un patrimonio documental?
-Cuando tiene datos históricos, cuando responde preguntas: que, cómo cuándo, dónde, por qué y en lo posible, quién la sacó. Aunque también puede ser patrimonio si no se conocen todo esos datos. La foto histórica es distinta a la artística. La histórica siempre debe informar. A veces la foto forma parte de un reportaje y eso le da valor testimonial.

-¿Tiene alguna foto preferida entre tantas que vio e investigó?
-Tengo una que prefiero, porque es preciosa y porque hasta ahora no hemos podido documentar. Es una de cabezudos que muy posiblemente sea de un carnaval, con unos niños trepados a una reja. La imagen es lindísima, pero no aporta muchos datos, ni el años, ni el barrio, ni la fiesta. Solo sabemos que era algo popular y callejero. También me gustan mucho las fotos de la calle Yacaré, cerca del Mercado del Puerto, porque hablan de aquella ciudad y porque es un sitio que hoy tenemos muy presente; nos permite un juego de imaginación muy divertido.

-¿Qué es lo primero que mira en una foto?
-Si hay personas, los gestos, quizá para saber que sentían en ese momento. Si se trata de un paisaje, es interesante compararlo con la actualidad. Para documentarla, miramos en función de las preguntas que una imagen debe responder: qué, cómo, cuándo, dónde, por qué y si se puede, quién la sacó. Parece lógico pensar que una foto es distinta a una pintura, porque se saca con una máquina, pero eso no quiere decir que no sea subjetiva; al contrario, un buen fotógrafo siempre pone mucho de si sentir y su pensar en una foto.

Daniel Sosa, coordinador del Centro de Fotografía de Montevideo
“La huella del tiempo también es información”
“En el Centro hacemos dos trabajos con una foto que se deterioró por el paso del tiempo o por las condiciones como fue guardada. Para ser entregada al público, la recuperamos hasta que se parezca lo más posible a como era el original. Para el archivo histórico se conserva el deterioro, porque la huella del tiempo también es información”.
“La era digital democratizó el acceso a fotografiar y a ser fotografiado. Casi todos los celulares tienen una cámara; la fotos se envían por internet, se trasmiten al instante. Pero no mejoró la calidad del rollo revelado con emulsiones y empeoró la preservación de los documentos fotográficos. Hasta ahora, una familia de cualquier pueblito revuelve un cajón y encuentra fotos. En el futuro nos será así; ahora se guardan en la computadora o en el CD, y muy pocas se imprimen. En el futuro habrá pocas cajas de esas que disfrutamos en familia o que vamos a buscar los archivos fotográficos”.

Para conocer el estado de una fotografía se utiliza un espectrofotómetro: un instrumento de óptica que mide la presencia de sustancias y microrganismos.

Cuatro pasos
Una foto documentada por el CDF pasa por cuatro etapas:
-Recepción, identificación y reconocimiento de su valor patrimonial.
-Conservación preventiva del material: se coloca en cajas de conservación a temperatura controlada, se limpian y se guardan en sobres especiales libres de ácido.
Investigación de su información y descripción histórica.
-Digitalización, archivo y puesta a disposición del público.

La memoria del futuro
El Centro de Fotografía de Montevideo tiene como propósito la preservación de la imagen fotográfica del país y su historia, y la divulgación de la obra y la trayectoria de autores contemporáneos. Desde 2005 ha realizado cuatro exposiciones en homenaje a Dina Pintos de Del Castillo (1929-2002), Aurelio González (1929), Ferruccio Musitelli (1927), Héctor Borgunder (1936).

Dina Pintos (1929-2002)
La plata y el pixel
Dina Pintos por Diana Mines.
(CDF)
La fotógrafa y docente universitaria fue una autoridad en el estudio y el análisis de la imagen, pionera, emprendedora y precursora en la creación del CDF. En su ensayo De la plata al pixel, escrito en 2000, defendía del valor de la fotografía que utilizaba el revelado de películas como fuente de creación artística. “Su valor como documento testimonial, limitado desde hace mucho tiempo por las habilidades del montaje y del laboratorio, aún mantenía su capacidad de provocar ese incomparable estremecimiento de realidad: el rayo de luz que había tocado ese objeto, esa escena, esa persona, había impresionado el material sensible en un instante único e irrepetible. Pero todo cambió con la cámara digital y la alteración de la fotografía por un programa de computadora, que han acabado con la realidad”. El CDF realizó en 2005 su primera muestra anual, en homenaje a la recordada intelectual.

Aurelio González durante el hallazgo
del archivo fotográfico del diario
El Popular, enero de 2006.
(Pablo Larrosa)
Aurelio González (1931)
La memoria del futuro
Nacido en Uad-Lau, Marruecos, de padres españoles y emigrado a Montevideo en 1952, fue jefe de reporteros gráficos del diario El Popular. En 2003, el CDF inició el proceso de digitalización y documentación de las históricas fotografías que El Gallego custodió durante la dictadura. En una primera etapa se trabajó con el archivo entonces disponible, con imágenes de la huelga general de 1973 que resistió a la dictadura por entonces recién impuesta. El Gallego González es reconocido como un gran fotógrafo y también por su arrojo y su carácter decidido. Fue decisiva su valiente intervención para conservar y recuperar la mayor parte del patrimonio visual del periódico, oculto por casi 33 años en un ducto del Palacio Lapido. Así se enriqueció el acervo periodístico del pasado reciente con episodios y personajes del período transcurrido desde 1957. “Son muchas las razones para homenajear a González: documentalista, fotoperiodista, comprometido y trabajador incansable, que representa una forma de ver y relatar una época”, señalaba el CDF al presentar la muestra realizada en 2006.

Ferruccio Musitelli (1927-2013)
Lo que no está no existe”
Fucho por su nieto, 1988.
(CDF)
La frase del gran fotógrafo y cineasta se refiere al drama del documentalista que vive la incertidumbre sobre lo que ha logrado registrar o lo que se ha perdido para siempre. “Pero, lo que está, ¿existe realmente? ¿existió alguna vez? ¿Son sus imágenes efectivamente reflejo de una realidad o son apenas una sección, una selección que su ojo realiza? Fucho Musitelli no tomó estas fotografías: las creó a partir de fenómenos visibles, pero, como sujeto creador, estas imágenes fueron inventadas por él”, afirmaba Oscar Bonilla cuando presentó la muestra, realizada en 2007. Las fotografías que conserva el CDF datan de las décadas de 1950 y 1960, salvo la que muestra al propio Musitelli, pequeño entre enormes equipos de filmación, tomada por un nieto en 1988.

Héctor Borgunder (1948)
Una huella de luz
La fotografía provoca ante todo en quien la mira un doble estremecimiento: un rayo de luz tocó esa realidad e imprimió su huella en el material sensible, es su testimonio de existencia. Y además, ese instante es irrepetible. Es el trabajo del gran fotógrafo que recibió más de cien distinciones nacionales e internacionales, docente de la Escuela Nacional de Bellas Artes, director de Cursos del Foto Club Uruguayo y del Cine Universitario del Uruguay, jurado de concursos organizados por la Federación de Arte Fotográfico con sede en París y de las Bienales Internacionales organizadas por la Federación Argentina de Fotografía. Héctor Borgunder, más conocido como Chumbo, expuso en 2008 en el Centro de Fotografía.

Red de archivos fotográficos
SODRE
El Archivo Nacional de la Imagen posee un acervo de 100.000 negativos fotográficos, 80% en soporte vidrio y el resto acetatos, desde 1870 hasta la actualidad. Tiene 5.000 películas cinematográficas 2.000 videos, un Centro de Documentación y un museo de aparatos de cine. Está abierto de lunes a viernes, de 10.15 a 15.30 horas, en Sarandi 430, 1ª piso, Montevideo. Teléfono: 915 54 93. Sitio web: http://www.sodre.gub.uy. Correo electrónico: ani@sodre.gub.uy

Arquitectura
El Archivo del Servicio de Medios Audiovisuales de la Facultad de Arquitectura tiene un acervo de imagen fija, videocasetes y CD ROM: fotografía digital y producciones multimedia de obras arquitectónicas, espacios urbanos, arte, y costumbres en Uruguay y en el mundo. Preserva 52.000 diapositivas sacadas de entre 1940 y 2002, 15.000 digitalizadas y 3.600 imágenes que datan desde 2000. Está abierto de lunes a viernes de 15 a 18 horas, en el edificio de la Facultad de Arquitectura: Bulevar Artigas 1031. Teléfono: 4001106 al 08, interno 134. Sitio web: http://www.farq.edu.uy/sma. Correo electrónico: sma@farq.edu.uy

Biblioteca Nacional
Dirección: 18 de julio 1790, Montevideo.
Teléfono: 409 60 14
Sitio web: http://www.bibna.gub.uy
Correo electrónico: bibna@adinet.com.uy

Fuerza Aérea Uruguaya
Dirección: Ruta 101 Km. 19500, Canelones.
Teléfono: 604 00 21
Sitio web: http://www.ssra.gub.uy
Correo electrónico: info@ssra.gub.uy

Archivo General de la Nación
Dirección: Convención 1474, Montevideo.
Teléfono: 900 72 32
Correo electrónico: direccionagn1474@adinet.com.uy

Museo Histórico Nacional
La Casa de Juan Francisco Giró posee un amplio acervo fotográfico en su sede de Cerrito 586, Montevideo. Teléfono: 915 70 03. Sitio web: http://www.mec.gub.uy/museo/mus_hist. Correo electrónico: mhistoricnac@mixmail.com.

Antes de que el término Fotografía se utilizara para identificar la técnica de impresión química de imágenes, fue conocida popularmente como daguerrotipia.

Fotografía
Una historia de imágenes sensibles

En 1816 el francés Joseph-Nicéphore Niépce obtuvo la primera fotografía sobre papel con una cámara oscura y diez años después realizó su primera heliografía, partiendo del químico betún de Judea. El descubrimiento fue comunicado en 1839, por Louis-Jacques-Mandé Daguerre, conocido también como Louis Daguerre, tras perfeccionar una técnica que tenía utilidad científica, técnica, médica, astronómica, judicial, etnológica y que podía ser usada como documento. Ese mismo año fue presentado el daguerrotipo, que realizaba una copia única hecha sobre emulsión o soporte de cobre.
En 1840 el británico William Henry Fox Talbot inventó el calotipo: un negativo de papel copiado sobre otra hoja, que por contacto creaba un positivo. Supuso, además, el invento de la copia fotográfica, ya que un único negativo podía dar lugar a varios positivos y su tiempo de exposición era mucho menor, de uno a siete minutos. Tres años después el químico británico John Frederick William Herschel fue el primero en aplicar los términos "positivo" y "negativo" a las imágenes fotográficas. En 1880, el francés León Favre solicitó patente para su nuevo sistema de color, y en 1888, George Eastman lanzó la cámara Kodak. Su gran éxito comercial fue la introducción del rollo de papel fotográfico, que sustituyó las placas de cristal; posteriormente lanzó el celuloide.
En 1931 se descubrió el flash electrónico, que se utiliza sobre todo cuando la luz existente no es suficiente. En 1948 nació la fotografía instantánea de Polaroid: una cámara que revelaba y positivaba la imagen en tan solo un minuto. En la década de 1990 se inició la digitalización: las imágenes son capturadas por un sensor electrónico con unidades fotosensibles que puede almacenarlas en una memoria.

Fondo documental
Es cada conjunto de documentos producidos, acumulados o utilizados por una persona física, familia, o entidad, según las Normas Internacionales de Descripción Archivística ISAD. En la actualidad el CDF posee 15 fondos documentales de distinto origen: público y privado, institucional, familiar, profesional. Un trabajo de búsqueda e investigación que le permitió pasar de las 30.000 copias que poseía el Archivo Fotográfico de Montevideo hasta las 100.000 imágenes históricas y contemporáneas que la institución custodia.

Pasado reciente
En Uruguay, son escasas las imágenes públicas del pasado reciente. Marcado por la crisis de la democracia de la década de 1960 y por la última dictadura (1973-1985), este fragmento de la historia del país ha quedado borrado del imaginario visual de nuestra sociedad”, afirma el fotógrafo Carlos Contrera al explicar la firma de un convenio con el Centro de Estudios Interdisciplinarios Uruguayos (CEIU) de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, que le permitió al CDF integrar el grupo "Archivos y Derechos Humanos."

Tertulias Fotográficas
Son reuniones de intercambio colectivo -con uno o más expositores- para promover la investigación y la difusión de la fotografía y debatir sobre temas de la disciplina en nuestra sociedad. Se realizan cada primer viernes de cada mes y son coordinadas por el CDF y su Asociación de Amigos.

Nosotros en Melilla
Es un proyecto que se propone ampliar el acervo del CDF y colaborar con la memoria colectiva fotográfica zonal y barrial. “Trabajamos con testimonios visuales y orales: imágenes antiguas, materiales de los vecinos (artículos de prensa, publicaciones barriales, archivos personales o institucionales) y documentación sobre el barrio en archivos y bibliotecas de la ciudad”, explica Daniel Sosa. El 2008 fue el año de Melilla, que se cerró con una exposición fotográfico-histórica.

Fotograma al Solís
Fotograma es un encuentro internacional organizado por el Centro de Fotografía de Montevideo para crear un espacio de aprendizaje e intercambio cultural. En la primera edición, de noviembre de 2007, hubo muestras en Montevideo, Maldonado, Durazno, Cerro Largo, Río Negro. Desde 2009 funciona la Fotogalería del Solís, coordinada con el Centro de Investigación, Documentación y Difusión de las Artes Escénicas (CIDDAE). Sus temas: danza, ópera, música, títeres, circo, carnaval, teatro, artistas y trabajadores de la cultura, montajes, puestas en escena.

AGRADECIMIENTOS: Daniel Sosa, Carlos Contreras, Isabel Wschebor, Pablo Tate.